Composición. La regla de los tercios

En esta entrada vamos a tratar el tema de la composición.
La composición en fotografía es uno de los temas más importantes, junto con una buena exposición, distancia focal, ISO... (conceptos que trataremos en otras entradas).

Una de las reglas más básicas es la conocida "Regla de los tercios", aunque antes de nada he de aclarar algo: no todas las buenas composiciones atienden a esta regla.
Utilizar este "truco" es simplemente una ayuda a la hora de componer fotografías, y es una regla que hace que nuestras fotos tengan más interés; sin embargo, hay composiciones que no siguen esta regla y son igualmente interesantes.

Así que una buena composición no sólamente depende de esta y otras reglas sino también del sentido común, la práctica y la sensación que queramos transmitir en la fotografía.
Tras lo dicho, empezaré a explicar en qué consiste esta "Regla de los tercios".



Regla de los tercios

La regla de los tercios consiste en hacer cuatro líneas imaginarias, dos verticales y dos horizontales, situadas a un tercio una de la otra y de los bordes de la imagen. De esta forma, se crean cuatro puntos de intersección.

En la siguiente imagen se puede ver cómo son esas líneas, su situación y cómo se crean esos cuatro puntos de intersección:

 Una vez que nos hemos imaginado esas líneas y esos puntos, lo que tenemos que hacer es dirigir a uno de esos puntos el rasgo de la persona, animal o paisaje que queremos que llame la atención. Por ejemplo, en la fotografía anterior, se pretende destacar el ojo del gato, por lo que lo situamos en un punto de intersección de esas líneas. De esta manera se focaliza la atención en el ojo del gato, y se equilibra la imagen, más que si hubiéramos situado el ojo en el centro de ésta.

A continuación os pongo la fotografía sin las líneas y sin los puntos para que veáis como en realidad el ojo del gato queda focalizado y nos llama inmediatamente la atención.

Si tuviéramos varios puntos interesantes que queremos destacar, para que la imagen quede equilibrada intentaremos que estén situados en los puntos de intersección en forma de diagonal.

En la imagen de a continuación se hace hincapié en el rostro y las piernas de la chica, los puntos de intersección que se utilizan son los de una diagonal.

La fotografía resultante es:

Esta regla también resulta útil cuando realizamos fotorafías de paisajes, en donde el horizonte es el protagonista. Si queremos llamar la atención del cielo, colocaremos la línea del horizonte en la línea imaginaria inferior; si por el contrario, queremos llamar la atención del suelo, colocaremos la línea del horizonte en la línea imaginaria superior.

En la fotografía anterior se muestra un amanecer, en el que se ha querido resaltar el cielo y el "skyline", por lo que se ha compuesto la fotografía disponiendo el horizonte en la línea imaginaria inferior. A continuación pongo la imagen sin las líneas para ver el resultado:

Estos ejemplos son sólo unos pocos de los que se podrían hacer, en esta página web hay más ejemplos con fotografías.

Espero que os sea útil la información y que para cualquier duda o participación escribáis un comentario en el post.

¡¡Un saludo a tod@s!!


** Todas las imágenes son fotografías propias.