La Apertura (la famosa "F")

"En óptica, apertura es un agujero o perforación a través de la cual pasa la luz" | Fuente: wikipedia

La apertura está regulada por el diafragma, cuanto más abierto está el diafragma más apertura estaremos usando, e inversa.
Por tanto, la apertura determina cuánto de abierto está el diagragma; si está abierto llega mucha luz a la lente, en cambio, si está cerrado llega menos luz a la lente. Por tanto, si hay mucha apertura más clara saldrá la fotografía que si utilizamos una poca apertura.


Las aperturas se expresan con el término "f", a mayor apertura "f" más baja (f2.8) y a menor apertura "f" más alta (f22). La expresión "f" al principio nos confunde porque funciona al contrario de lo que en un principio pensamos lógicamente ya que a más apertura menos "f", e inversa (hay que pensar un poco al revés).

La apertura en fotografía es una variable que da mucho juego, ya que se consiguen efectos en las fotografías que aportan mucho carácter cuando son intencionados y se controlan bien.
La apertura grande difumina los elementos que se encuentran atrás y en frente del elemento principal que estamos enfocando; en cambio, las aperturas pequeñas resaltan también los detalles del fondo y del primer plano.
Normalmente, las aperturas grandes se utilizan para retratos, "macros"... y las aperturas pequeñas para paisajes; pero no tenemos que olvidarnos que tenemos que ser creativos, y podemos hacer intencionadamente lo contrario y que salga una fotografía realmente original.

Aunque estemos hablando exclusivamente de la apertura del diafragma, es necesario conocer y manejar la relación de ésta con las otras dos variables de las que hablábamos en entradas anteriores (la velocidad de obturación y la sensibilidad ISO).
No tenemos que dejar a un lado el hecho de que cuando utilizamos aperturas grandes, entra más luz a la lente y la fotografía sale más clara; o dicho de otra manera, necesita una velocidad más alta para conseguir la misma exposición que con una apertura grande. Esto que parece un poco lioso lo vemos a continuación con un ejemplo:

Apertura: f3.5
Velocidad: 1/6 segundos (0,17 segundos)
ISO: 100

Apertura: f8
Velocidad: 1/1,6 segundos (0,62 segundos)
ISO: 100

Apertura: f3.5
Velocidad: 5 segundos
ISO: 100

 Fotografías propias | Míriam Pastor Lamberto

A continuación algunos ejemplos de fotografías:

Apertura grande, diafragma abierto, "f" pequeña:

En esta fotografía se ha utilizado como punto de enfoque el rostro del gato y una f3.5, por lo que el resto del cuerpo y el fondo aparecen desenfocados/difuminados. Esto hace que dirijamos la mirada hacia un punto concreto. Vemos a continuación la fotografía final:

Fotografía propia | Míriam Pastor Lamberto

Apertura pequeña, diafragma cerrado, "f" grande:

En esta fotografía se ha utilizado como punto de enfoque el sol tras las nubes y f18, por lo que aunque se haya enfocado en un punto determinado, el resto del paisaje también sale nítido; si hubiera utilizado una f3.5, las olas y la arena habrían salido difuminadas. Vemos a continuación la fotografía final:

Fotografía propia | Míriam Pastor Lamberto

Como vemos, dependiendo del momento, de lo que estamos fotografiando y de la intención que damos a la fotografía nos convendrá utilizar una gran apertura o una pequeña.

No debemos olvidar que también tenemos que controlar las otras dos variables (la velocidad de obturación y la sensibilidad ISO), así que siempre estaremos combinando los tres elementos para conseguir el resultado que queremos.

¡Espero que esta entrada os sirva de ayuda y empecéis a darle carácter a vuestras fotos!